Entrevista: En conversación exclusiva con Viva , el cantante Jorge ...

La Nación Costa Rica - Costa Rica

Entrevista: En conversación exclusiva con Viva , el cantante Jorge Villamizar habló de su antigua agrupación y su propuesta en solitario
Gerardo González V. | gegonzalez@nacion.com

Sin arrepentimientos y con la satisfacción de hacer lo que quiere, Jorge Villamizar está encantado con su carrera como solista.

Quien fuera la voz del grupo Bacilos habló en exclusiva con Viva , vía telefónica, previo al concierto que dará el sábado 28 en el bar Gaira, en Escazú.
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Además de hablar de su aventura como solista, Villamizar alaba la nueva libertad que tiene al caminar por su cuenta, aunque asegura mantener una buena relación con sus excompañeros.

¿Cómo se ha sentido en su etapa como solista?

Muy bien. Ha sido un proceso interesante. No es algo inmediato, me he dado cuenta. Yo pensé que era sacar el disco y comenzaba una nueva etapa. Me he dado cuenta de que así como me tomó 12 años formar lo que fue Bacilos, estoy seguro que me va a tomar un buen tiempo definir quién es Jorge Villamizar como solista.

Pero en realidad, estoy contento, siento que voy por el camino que es, a pesar que extraño a Bacilos. Tengo fe de que el futuro es interesante.

¿Siente mayor responsabilidad ahora sobre el escenario?

Claro, es una mayor responsabilidad fuera y en el escenario, pero está bien. La libertad y la responsabilidad van juntas; una por otra.

¿Qué es lo que más disfruta de su etapa como solista?

La libertad de poder decir lo que yo quiera y el poder hacer conciertos yo solo con la guitarra. También poder organizar músicos nuevos y tocar con gente diferente. Eso siempre es bueno.

Tras su salida de Bacilos, usted se dedicó a viajar por varias lugares, ¿cuál fue la intención de esos viajes?

Yo con Bacilos viajé tanto que siempre estaba corriendo. Por ejemplo, en Costa Rica, conocí el hotel, el venue (lugar del concierto) pero en esos días tuve la oportunidad de explorar más esos sitios. También fue un viaje para buscar nuevas perspectivas, para cantar, para tener un estado mental un poco desconectado del día a día de mi vida y comenzar a buscar quien era yo.

¿Siempre tuvo claro que quería volver a la música?

Siempre, yo eso no lo he dudado, tal vez antes, pero a estas alturas ya estoy muy viejo para volverme abogado o arquitecto.

¿Sigue en contacto con sus compañeros de Bacilos?

Sí, claro.

¿Cree que algún día puedan volver a tocar juntos?

Sí seguro, pero no en los próximos años. Va a pasar un tiempito. Puede que hagamos algo juntos, pero yo soy honesto y cada cual está en lo suyo. Fueron dos años juntos y, bueno, cada uno está donde está.

¿Pero si quedó una buena relación?

Sí, yo creo que sí.

Sonido propio. ¿Cómo describe el sonido de su primer disco como solista?

Es un disco muy de búsqueda y análisis personal; es más maduro, creo que es un disco generacional, la gente que más va a conectar con esto son los treintones y cuarentones que están viviendo experiencias similares a la mía. La verdad no quise ser ni me interesa hacer un disco juvenil ni pachanguero, sino un disco de experiencias y pensamientos propios de lo que he vivido.

A nivel musical, ¿cómo se diferencia del sonido de Bacilos?

Es completamente diferente. Es es un disco que lo trabajé con un Dj , Richard Blair, nos juntamos y trabajamos por seis meses desarrollando un nuevo sonido. Tiene un fundamento electrónico pero está acompañado de grandes músicos que mezclaron sus interpretaciones sobre una base programada en computadora. Es un disco diferente, suave. Es bailable, no como salsa, pero sí como si bailaras house o ciertas canciones de lounge que te mueven el cuerpo, pero no está basado en cinco pasos caribeños como lo hacía Bacilos.

¿Temió usted que su público rechazara este cambio de sonido?

Por un lado sí, pero me da más miedo dedicarme a hacer lo que la gente quiera. Me metí a esto para ser libre, yo he tenido suerte de que las cosas que he hecho le gusten a la gente, pero hay diferentes tipos de gente y lo que uno haga no le va a gustar a la misma gente.

¿Cómo evalúa la recepción de sus seguidores hasta el momento?

Mezclada. Hay gente que le ha fascinado y otra que no lo ha entendido y que esperaba más de Mi primer millón , eso no está ahí, pero a la gente abierta al cambio, le ha gustado y he recibido críticas excelentes. Con eso me conformo porque no puedo hacer feliz a todo mundo.

Cuénteme sobre el tema El colombiano errante.

Es una canción que habla de mi experiencia como colombiano creciendo en el exterior y fundamentalmente de un niño migrante, no una persona que toma la decisión de irse, si no de una persona hija de una pareja de emigrantes, que es mi caso. Habla de que yo he vivido en muchos países y sigo siendo colombiano, aún dentro de la misma Colombia soy de muchas partes a la vez, nunca me he podido definir de una sola ciudad.

¿Qué tiene preparado para su presentación en Costa Rica?

Voy con una banda muy buena y tengo muchas ganas de reencontrarme con los ticos, hace mucho tiempo ya que Bacilos pasó por allá.

¿Va a cantar temas de Bacilos?

Sí, claro; yo compuse todas esas canciones y son parte de mi vida, de mi historia y las llevó conmigo.

Usted fue a una escuela naval, estudió ciencias políticas, administración pero siempre volvió a la música, ¿quién persiguió a quién? ¿La música a usted o al revés?

Inicialmente, tenía el trauma latinoamericano de clase media, de que tenía miedo a dedicarme a lo que me gusta y tener que estudiar lo que dicen tus papás. Somos sociedades tradicionales y relativamente pobres, en las cuales hay muy poco campo para las maniobras arriesgadas, así que poco a poco fui cayendo en cuenta de que cada cual tiene su vocación y que la gracia de la vida es hacerle caso a esa vocación, seguir el llamado y vivir de eso. Si uno lo hace por vocación, seguramente le va a ir bien.